Cuando uno accede al recinto del Monasterio de Piedra, sorprenderá muy gratamente la explosión de naturaleza que se abre ante tus ojos. Las aguas del río Piedra despliegan ante el visitante todo un repertorio de caprichosas cascadas. A lo largo de un pausado recorrido de no menos de dos horas, se puede visitar todo el Parque Natural a través de un camino correctamente señalizado. Recomiendo seguir el sendero tal como indica el mapa que te facilintan al adquirir la entrada para no perderse ningún detalle de este hermoso rincón aragonés.
En la parte más baja del parque se halla un centro de cultivo piscícola dedicado a la cría de truchas. El lugar es idóneo para esta actividad pues, tras las numerosas cascadas que salvan las aguas del río Piedra, estas están muy oxigenadas. Para conocer el proceso completo de cría de estos salmónidos recomiendo visitar el centro de interpretación en el que, a través de una proyección audiovisual, se puede conocer el proceso biológico, no solo de las truchas, sino también de los cangrejos de río.
Cascada el el Parque del Monasterio de Piedra. |
En la parte más baja del parque se halla un centro de cultivo piscícola dedicado a la cría de truchas. El lugar es idóneo para esta actividad pues, tras las numerosas cascadas que salvan las aguas del río Piedra, estas están muy oxigenadas. Para conocer el proceso completo de cría de estos salmónidos recomiendo visitar el centro de interpretación en el que, a través de una proyección audiovisual, se puede conocer el proceso biológico, no solo de las truchas, sino también de los cangrejos de río.
Buitre durante la exhibición de aves rapaces. |
Otro importante atractivo turístico de este parque es la espectacular exhibición de aves rapaces que se ofrece durante tres veces al día junto a la salida. No olvidéis mirar los horarios para no perderos el prodigioso espectáculo de buitres, águilas, buhos, o lechuzas volando a muy pocos centímetros de vuestras cabezas en busca de los señuelos que les ofrecen los cetreros.
En el Monasterio cisterciense, además del hermoso claustro y las ruinas a las que quedó reducida la iglesia tras las Desamortizaciones de Mendizábal, podéis visitar el museo del vino. Para recordar que en este monasterio zaragozano se fabricó por primera vez el chocolate en europa el viajero podrá enriquecer su visita a través de una exposición sobre el chocolate.
Sala capitular del Monasterio de Piedra. |
En definitiva, puedo afirmar que este paraje es uno de los lugares más completos para pasar un día con la familia o con los amigos. Junto a la entrada encontraréis un par de restaurantes y un área de picnic para comer. Si un día os parece insuficiente, un acogedor hotel os recibirá para que la jornada en el Monasterio de Piedra sea inovidable.
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