Para deleite de los amantes de la nieve.
El Pirineo ilerdense en conjunto es una de las zonas de la península Ibérica que cuenta con las estaciones de esquí más apetecibles para los amantes de los deportes de invierno. Si, por proximidad, le asociamos las del Principado de Andorra, como puede ser la mítica estación de Grand Valira, no tendremos duda de que nos encontramos en una de las mecas del turismo de invierno del sur de Europa. En este post hacemos un breve recorrido por las seis estaciones del Pirinéo de Lérida citando algunas de las características más singulares de cada una de ellas.
Baqueira Beret. Esta estación está ubicada en el valle de Arán. Es una de las más conocidas y populares. Cuenta con 170 kilómetros de pistas balizadas y esquiables repartidas en 78 pistas. Su cota máxima es de 2510 metros y la mínima de 1500. Sus 33 remontes tienen una capacidad de transporte de 57.983 personas por hora.
Boi Taül. Sus cuarenta y cinco kilómetros de pistas a las que se accede a través de quince remontes se sitúan entre los 2020 metros en su cota más baja a los 2750 en su cota máxima, siendo la que alcanza la cota más alta de todas las estaciones de esta zona del Pirineo.
Espot Esquí. Estamos ante una estación de esquí pequeñita pero no menos interesante que las vistas anteriormente. Cuenta con veintitrés kilómetros de pistas. Sus seis remontes facilitan el acceso de los esquiadores a lo más alto de las mismas.
Port Ainé también es una estación pequeña en la que los deportistas pueden disfrutar de los casi veinticinco kilómetros de pistas cuyo acceso lo facilitan 8 remontes.
Port del Comte no es de las estaciones más conocidas pero en ella los esquiadores tinen hasta 50 kilómetros de pistas esquiables. Con 16 remontes puedes acceder a lo más alto, aunque en este caso el desnivel salvado no es demasiado. Las cotas de Port del Comte van de los 1700 metros a los 2400 en su cota máxima.
Tavascán es la más modesta de las estaciones de esquí que encontramos en la zona del Pirineo que corresponden con la provincia de Lérida. Posee solo seis kilómetros de pistas esquiables con tres remontes. Aun así, esta estación no debe de pasarse por alto.
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