Para dormir en un palacio en el centro de la ciudad
En la plaza de Viriato, personaje que evoca el lejano pasado de estas tierras, abre sus puertas el Palacio de los condes de Alba de Aliste. Un palacio renacentista que sorprende en una ciudad famosa por sus iglesias románicas. En este palacio, de sobria fachada, sobresale su magnífico claustro humanista. En él se plasmó, a través de la iconografía, el ideal humanista al que perseguían sus moradores. Para ello reprodujeron en sus medallones la imagen de veinte soldados ilustres de la historia de España.
El edificio es del siglo XV y se construyó sobre una antigua alcazaba musulmana. En la decoración del interior se encuentran armaduras, escudos heráldicos, doseles y tapices que transmiten al huésped la sensación de moverse en un entorno medieval.
Muy cerca del Parador de Turismo se encuentra algunas de las iglesias románicas más interesantes de Zamora como la de San Cipriano, que está justo al lado, o la de La Magdalena, de soberbia portada. Tampoco queda demasiado lejos la Catedral, con su inconfundible cúpula gallonada, o el Castillo, también románico.
Este hotel también es un punto estratégico para recorrer el resto de la provincia. Puebla de Sanabria, junto al lago homónimo, la pequeña ciudad de Toro, las lagunas de Villafáfila, próximas a Villalpando, o el cuidado castillo de Villalonso son algunos ejemplos.
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