Mágico lugar en Sierra de Gata
Trevejo es una preciosa aldea medieval con sus típicas construcciones en piedras. Paseando por sus calles el viajero se transportará a otra época retrocediendo en el tiempo. Un pueblecito con muy poca población pero lleno de magia.
Por Trevejo pasaron musulmanes, cristianos y también franceses. Paseando por sus calles se llega a los restos del castillo. Castillo cuyo origen se remonta a una fortaleza musulmana que sería reconstruida en el siglo XV por los cristianos. Fue destruido durante la invasión francesa para evitar que se refugiasen guerrilleros y aunque solo conserva la torre del homenaje y parte de la muralla desde él se obtienen unas maravillosas panorámicas.
La parroquia de San Juan Bautista es del siglo XVI y se levanta a los pies del castillo. Tiene una sola nave, un altar exterior y la cabecera del templo es cuadrada. Está rodeada de pequeñas tumbas antropomórficas de piedra y distintos tamaños. A pocos metros se puede ver la espadaña que se levantó sobre una antigua torre defensiva.
El pueblo en sí es una pequeña maravilla. Silencio y paz acompañaran a los visitantes por sus contadas calles. Bancos de piedra ofrecen descanso al viandante. Una coqueta taberna, El buen Avío, en torno a la que merodean multitud de bonitos y cariñosos gatos, invita a sentarte a tomar y comer algo para reponer fuerzas.
En Trevejo el viajero se puede hospedar en los apartamentos A Fala. Construidos en una antigua vivienda y manteniendo la estructura típica de la arquitectura de la zona disponen de todas las comodidades de los tiempos actuales. Habitaciones con encanto, chimenea, barbacoa... Desde Trevejo se pueden realizar varias rutas de senderismo de diferente dificultad, también en bici o a caballo y conocer los cinco municipios nombrados Bien de Interés Cultural de la Sierra de Gata: Trevejo, San Martin de Trevejo, Gata, Robledillo de Gata y Hoyos. Para volver a descansar a estos fabulosos apartamentos a respirar un verdadera aventura medieval.
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