A las afueras de Mdina.
Rabat creció a las afueras de la monumental localidad de Mdina, en el centro de la isla de Malta. En cierto modo se configuró en sus orígenes como lo que hoy día consideramos los barrios más modestos y residenciales de una gran ciudad: los arrabales. El atractivo más espectacular de Rabat son las catacumbas que forman toda una ciudad en el subsuelo.